No podremos resolver ninguna cuestión nacional sin la unidad. Tenemos que entender que solo el hombre tiene libre elección en el trabajo hacia la unidad, de mejorar la conexión entre todas las partes de la realidad con su buena participación. Si el hombre, la única criatura con esta habilidad, trata de traer todas las fuerzas en el sistema a un balance, para lograr la tranquilidad, entonces tiene el poder de librarse de todos los problemas y crisis.
La falta de equilibrio entre la humanidad y la naturaleza ha llegado a un punto en el que pone en peligro nuestra supervivencia. Es la única manera en que la naturaleza puede despertarnos al entendimiento de que debemos cambiar. Esta amenaza de seguridad, que es crucial para la existencia del hombre, es el resultado de pensar solo en nosotros mismos.