Cuando ves las sociedades del mundo, es claro que las tensiones van en aumento en todas partes. Ya sea entre derecha e izquierda, religiosos y laicos, conservadores y progresistas, negros y blancos, locales e inmigrantes, las razones son innumerables pero la tensión es la misma: dos opuestos que quieren anular al otro.
No funcionará. Los contrastes crecerán, al igual que las tensiones. La realidad se basa en contrastes complementarios e interdependientes. Quita uno y cancelarás el otro. La sociedad humana no es excepción, aunque no reconocemos nuestra interdependencia y no queremos complementarnos. En cambio, queremos cancelar al otro. Creemos que cualquiera que no piense o hable como nosotros, es atrasado e ignorante, de ahí surge la cultura de la cancelación.
Pero, para el desarrollo, se requieren contrastes que se complementen ¿Cómo puede una parte tener razón y la otra estar equivocada? Si la realidad misma requiere la presencia de opuestos, ¿Cómo queremos cancelar a los que consideramos opuestos a nosotros, cuando en verdad, la existencia del opuesto a mí, es lo que justifica mi propia existencia? Si, por ejemplo, no hubiera conservadores, ¿habría progresistas? Todo el concepto de progresista existe porque existe el concepto de conservador.
Además y más importante: ninguna de las partes importa por sí misma. ¡Solo importa la tensión entre ellas! Las fricciones entre opiniones opuestas hacen que la gente piense, avance, construya, explore, desafíe, en resumen, ¡viva!
Por eso, debemos sentir objeción, consternación por la opinión de nuestros oponentes. Pero, al mismo tiempo, no debemos cancelarla; debemos reconocer que es la razón por la que sentimos tanta fuerza en ese tema. Su celo por su opinión, entusiasma nuestro celo y juntos, nos ayudamos a crecer.
Los contrastes de la sociedad son su fuente de energía; debemos aprovecharlos para construir una sociedad mejor, más fuerte y más saludable. No debemos ni podemos ponernos de acuerdo, sino complementarnos. Una vez que lo hagamos, todos nos beneficiaremos del poder de la sociedad, el poder de complementar los contrastes.
Buen día, aprender a vivir sin quitar hasta romper mis espejos me ha llevado a mucha insatisfacción, resistencia misma que se sigue manifestando cada día y es muy desgastante xq vivo en la dualidad y no en la unidad. Por lo pronto ya lo sé. Xq me desagrada la amargura del alma. Muchas gracias. Bendiciones infinitas 🙏🌹