El individuo con mentalidad de víctima tiende a sentirse herido por las acciones humillantes de los demás. Aunque, haya sido víctima de acciones incorrectas, desarrollar esa mentalidad es obsesionarse en culpar de sus desgracias, a las fechorías de los demás. El problema es que desarrollar esa mentalidad y verse como víctima perpetua, le impide reconstruirse y tener éxito en la vida. Al mantener la imagen de víctima, será perdedor eterno y como resultado, siempre fracasará.
Es muy difícil determinar exactamente dónde trazar la línea entre culpar a los demás de los males propios y explotar el mal recibido para obtener beneficios injustificados. En cualquier caso, perpetuar la imagen de víctima impide el esfuerzo personal por reconstruir la vida y desarrollar el potencial propio.
Por eso, para ayudar a las víctimas de cualquier conducta indebida, debemos centrarnos en lo positivo, no en lo negativo. En lugar de reforzar y perpetuar la imagen de gente pasiva y débil, cuya vulnerabilidad ha sido explotada, deberíamos enseñarle que fue perjudicada por malandrines que quieren hacerse notar, sin importar las circunstancias. Deberíamos empoderar a la gente y ayudarla a creer en sí misma.
El mismo enfoque debería aplicarse a poblaciones que han sido víctimas de abuso y explotación. En lugar de enseñarle a centrarse en los males, deberíamos ayudarle a ganar confianza y a conseguir lo que quiere, aunque no crea que pueda. No podemos cambiar el pasado, pero sí podemos elegir el futuro, ese debería ser nuestro objetivo.
El activismo de ciertos líderes de opinión y otras figuras públicas «a favor» de los sectores víctimas de la sociedad no es más que manipulación. La realidad demuestra que los «paladines de los afligidos», realmente no ayudan y al final, las víctimas se quedan con las manos vacías y paralizadas con su mentalidad de víctima, que les garantiza que no tendrán nada en el futuro, pues eligieron el enfoque equivocado. Aunque no cabe duda de que hay gente que ha obrado mal buscando venganza, no ayuda a las víctimas, que deberían centrarse en construir una sociedad justa y solidaria.
Si creamos solidaridad social, resolveremos totalmente el problema de explotación y abusos. Si queremos igualdad, debemos luchar por igualdad de oportunidades para salir adelante y lo conseguiremos si creamos una sociedad cuyos miembros se sientan conectados, cultiven la solidaridad y se sientan orgullosos de vivir en una comunidad unida y solidaria.
Extraordinaria reflexión!!! Vaya que he logrado salir del victimismo aún perdiendo todo, se que se puede volver a empezar de nuevo. Grandes lecciones me ha dado la vida x actuar estúpidamente cuando yo permito que el ego me gane la partida. Pero eso me acerca más al que lo puede todo Dios. Sabiduría. Muchas gracias. DIOS los bendiga grandemente.