Entramos en la segunda etapa de la pandemia del coronavirus, ¿qué sigue?

Pasamos el golpe inicial de la pandemia del coronavirus y ahora entramos en lo que podría considerarse su segunda etapa.

Ahora entendemos que el virus está aquí para quedarse por un tiempo, que abarca a todo el mundo y muchos ya estamos acostumbrados a quedarnos en casa sin trabajar.

Aún hay muchas preguntas sin respuestas en relación con la pandemia, por ejemplo, cuánto durará y cómo será la vida después, pero el hecho es que nos separamos de nuestra vida anterior y nos estamos preparando para una vida nueva.

El coronavirus llegó como tsunami, limpió nuestra vida de excedentes y excesos y nos permite enfocarnos en lo realmente necesario e importante en la vida.

«Aparte de satisfacer nuestras necesidades, seríamos prudentes si en este período nos equipamos con la sabiduría de la conexión»

Además, me alegra saber que mucha gente en todo el mundo, ya ve la gran necesidad de que la civilización humana se depure de la suciedad que acumuló.

También estoy seguro de que nuestra vida será diferente de lo que fue antes del impacto del coronavirus. Simplemente no debemos volver a lo que fue.

Aún no sabemos, hasta qué punto este virus nos cambiará. Además de limpiar las redundancias de nuestra vida -todo lo que nuestra naturaleza humana egoísta nos obligó a crear para beneficiarnos a expensas de la humanidad y de la naturaleza-, también nos «limpia» internamente, es decir, limpia nuestra actitud mutua y con la naturaleza. Por lo tanto, saldremos de este período como personas diferentes.

Además, después de esta ola inicial del tsunami de la pandemia que barrió los excesos que nuestro ego exagerado nos hizo crear, desarrollamos una mayor conciencia de la necesidad de salir de la esclavitud del ego, es decir, dejar de estar bajo la demanda de nuestro deseo de explotar a los demás en beneficio propio y comenzar a construir una vida nueva, una vida donde todos los excedentes contribuyan a construir una sociedad positivamente conectada.

Mucha gente que está recluida en su casa durante este período, se está dando cuenta de la falta de sentido de correr tras objetivos egoístas, consumistas y materialistas.

Hoy existe una mayor conciencia de lo simple y clara que puede ser la vida, si sólo consideramos la necesidad de satisfacer nuestras necesidades básicas y además, valoramos lo más importante en la vida. Es decir, cuando dejemos de saturar la vida con la basura que la publicidad nos obliga a adquirir, podremos comenzar a pensar en cómo lograr lo que es realmente importante.

¿Qué es lo realmente importante en la vida?

Si comenzamos a conectarnos de manera más solidaria, alentadora y considerada, en y con todo el mundo, si vemos que somos iguales ante la naturaleza, comenzaremos a prepararnos con nuevas «herramientas» que podríamos utilizar para superar el nivel de nuestras relaciones egoístas y de explotación e iniciaríamos una vida diferente.

¿En qué consiste esta vida diferente? ¿cómo será?

Si establecemos conexiones adecuadas, nos daríamos cuenta de algunos logros que nunca antes habíamos experimentado, nada menos que una vida eterna, una vida a la que no le siga la muerte, que sea plena y perfecta.

Alguna vez pensamos que nuestro universo era infinito, pero finalmente comprendemos que, aunque ha existido por millones de años, tiene límite. Sin embargo, al lograr conexiones positivas, al elevarnos por encima de nuestras actitudes egoístas mutuas, podremos descubrir un mundo ilimitado, un mundo espiritual eterno sin tiempo físico ni espacio ni movimiento, que existe únicamente en nuestro cambio de actitud mutua: de egoísta a altruista, de explotador a solidario, de manipulador a alentador, de servirnos sólo a nosotros mismos a ser considerado con todos, de individualistas a mutuamente responsables.

Por eso, aparte de satisfacer nuestras necesidades básicas, en este período debemos ser prudentes y equipamos con la sabiduría de la conexión, con la sabiduría de la Cabalá, que nos da un método probado para ayudarnos a desarrollar este cambio de actitud entre unos y otros. 

Además de darnos el método para establecer conexiones positivas mutuas, para descubrir una realidad eterna y completamente nueva, la sabiduría de la Cabalá también explica las causas más profundas detrás de todos los problemas y fenómenos que se desarrollan en nuestra vida.

Esta es la razón por la cual nuestra organización realiza grandes esfuerzos durante esta pandemia para explicar cómo y por qué apareció el virus y hacia dónde nos lleva, todo en el contexto más amplio del desarrollo humano, dentro del plan de la naturaleza.

Por lo tanto, esperamos que, especialmente durante este período único, aumente la conciencia de la humanidad acerca de que la naturaleza actúa en nosotros como iguales y también la conciencia de que, si nos relacionamos de la manera en la que la naturaleza se relaciona con nosotros, desbloquearíamos una realidad totalmente nueva, armoniosa y perfecta.