FMI: Covid daña más a los más vulnerables

[Familiares incineran los cuerpos de las personas que murieron por el coronavirus (COVID-19), en un crematorio en la aldea de Giddenahalli en las afueras de Bengaluru, India, 2/may/21. REUTERS / Samuel Rajkumar]

La pandemia es una bendición para los ricos y poderosos. Usan organizaciones como el FMI, para quedar bien, no tengo expectativas de ellos. Cuando actúan, es sólo para ganar aún más riqueza y poder. Cuando les das una idea, comienzan con ver el beneficio que obtendrán. Si no hay, no pierden tu tiempo ni el de ellos. Las cosas no cambiarán hasta que los pobres protesten por no poder sobrevivir. Es cuando, las cosas se pondrán interesantes. Pero el choque será de corta duración. Al final, nada cambiará, porque el ego no cambia.

Si los ricos pueden alejarse de la multitud, subiéndose a un jet privado, para ir a un resort en las Maldivas, ¿qué incentivo tendrán para cambiar algo? Parece que las cosas cambiarán hasta que la humanidad esté boca abajo en la cuneta. Mientras los jefes de estado puedan alejarse de todo y salirse con la suya, nada cambiará. Por el contrario, habrá «paz mundial» con base en una economía global, donde la gente sigue sin tener nada y hay un sistema moral global que dice: «Roba todo lo que puedas, como puedas y donde puedas».

Puedes pensar que no tiene sentido hablar de la situación, pero no es así. Llegará un cambio, pero sucederá hasta que la mentira sea expuesta al mundo y el mundo no la pueda ignorar. Cuando eso suceda, la humanidad no se quedará con los brazos cruzados, más de 400,000 personas son diagnosticadas con Covid, cada día, sólo en la India y 4,000 mueren por falta de oxígeno, de tratamiento médico básico o de instalaciones adecuadas. Hace unas semanas, esta desgracia estaba pasando en Brasil, ahora está pasando en la India, en unas semanas pasará en otro lugar, pero no nos importa hasta que nos golpea en la cara. No son sólo las organizaciones de «ayuda» las que son indiferentes; somos todos.

Si nos importara, no se atreverían. No tendrían la audacia de retorcer su rostro con falsos ceños de simpatía.

Sinceramente, no tengo ninguna esperanza de que el sufrimiento cause un cambio. La gente seguirá sufriendo hasta que sienta que la muerte es mejor que vivir, pero aún así no cambiará. Lo único que eventualmente nos cambiará, será darnos cuenta de que nuestra única fuerza está en los otros. Así, cuando todos se vuelvan hacia los demás, verán que no pueden unirse, que su corazón está congelado y por eso sufren. Hasta que todos intenten fusionar su corazón, percibirán que su ego es su enemigo, la causa de su aflicción y que siempre los ha engañado para que piensen que es culpa de otros.

Cuando intentamos formar un vínculo, finalmente encontraremos la fuerza y ​​el coraje que necesitamos para superar nuestras pruebas. El horrible futuro en nuestro camino se materializará sólo si permanecemos ajenos a la solución de la unidad, la única solución que puede funcionar. El sufrimiento humano no está escrito en piedra; está escrito en nuestro corazón de piedra. Si volvemos nuestro corazón hacia el otro, se suavizará y eso suavizará nuestro destino.

La naturaleza no es cruel. Ningún animal sufre tanto como nosotros, a menos que lo aflijamos. Lo único que es cruel por naturaleza es la naturaleza humana. Si la cambiamos, si nos acercamos a otros y formamos un vínculo similar al vínculo de todas las partes de la naturaleza, la naturaleza dejará de azotarnos. Así y sólo así, comenzaremos a sanar y comenzaremos a vivir de verdad.