¡Excelente! ¡Hay una vacuna para la Covid-19! Es hora de seguir adelante, a las garras del siguiente dolor …
Aunque de hecho, parece que casi terminamos con la Covid-19, está claro que no hemos hecho nada para merecer superarlo. Y lo que hicimos en 2020, lo arrastraremos en 2021. Con los desafíos adicionales que la siguiente etapa de nuestro desarrollo está destinada a presentarnos, no hay duda de que el siguiente año será más difícil que este.
¿Qué no hicimos? No aprendimos que somos interdependientes; no lo captamos con profundidad ni interiorizamos su mensaje: que debemos cuidar a los demás tanto, si no más, que a nosotros mismos o de lo contrario, nos enfermaremos unos a otros.
Tampoco nos enteramos de que el mercado laboral cambió para siempre y no preparamos uno nuevo, adecuado para la nueva era. No comprendimos que hoy el trabajo más importante es construir solidaridad y responsabilidad mutua. Todo lo que hicimos fue culparnos unos a otros por cada mal que pudimos detectar y nosotros nos consideramos libres de culpa. El año pasado, no nos dimos cuenta de que culpar a alguien por tener otra opinión, no sólo es erróneo; nos lesiona, pues si destruyes a otro, también te destruirás a ti mismo. No entendimos que no podemos tener razón si pensamos que el otro está equivocado por tener otra opinión. No estaríamos pensando lo que estamos pensando si los demás piensan lo que están pensando. Esa es la verdad y en 2020 no pudimos reconocerla.
El mercado laboral que deberíamos haber construido, para no volver a los fracasos del año pasado, debería haber sido uno en el que la gente trabaje en lo necesario y que el resto del tiempo se ocupe de cultivar a la solidaridad, pues, como acabo de decir, la obra más importante que podemos hacer hoy, es conectarnos. En cuanto a los ingresos, todo el que se dedique a estas ocupaciones pro sociales recibiría un ingreso suficiente para una vida digna. Reemplazará los programas de beneficios existentes, pero, para recibir estos ingresos debe participar en el esfuerzo para construir solidaridad en la comunidad, el país y el mundo.
Si bien, es una tarea difícil y no podremos lograrla en un solo año, ni siquiera dimos el primer paso, aquí es donde fallamos.
Ahora que hay vacuna, la gente querrá volver a la forma de vida de 2019. Puede funcionar por un tiempo, pero pronto disminuirá. Cambiamos durante el año pasado; necesitamos un nuevo tipo de satisfacción, más profunda y significativa, una que busque relaciones y no bienes materiales ni ostentación. Los empleadores buscarán empleados, pero serán mucho más difíciles de encontrar y nos guste o no, tendremos que ir en la dirección que Covid-19 nos señala: conexión en el corazón en lugar de en el cuerpo.
Y como antes, mientras más nos demoremos en 2021, más doloroso será el siguiente golpe, que seguramente vendrá.
No se ha podido establecer con certeza los orígenes de este covid 19, se dice hay que fortalecer el sistema. Claro lo tenemos debilitado y qran culpa de esto es la crianza industrial de los animales que comemos.
Los virus son inciertos y maravillosos, parte de la naturaleza de nuestro planeta, en los hielos glaciares milenarios hay almacenados muchos virus que no conocemos, provenientes de otras eras terrestres, con los deshielos los iremos conociendo y el ser humano con toda su inteligencia y tecnología se ha negado a darles prioridad pues esta mas que visto como algo así puede aniquilar a la humanidad. Este virus fue una prueba de lo que nos puede pasar y aun así hay Gobiernos que los ignoran y les restan importancia. Si en USA el presidente Trump lo hubiera enfrentado desde un principio en lugar de minimizarlo otra cosa hubiera sido, pero como dice el Sr Laitman no aprendimos nada, seguimos siendo unos egoístas, materialistas e ignorantes de siempre. Quedo mas que comprobado que este no era un problema individual sino de la sociedad y que debíamos unirnos y protegernos los unos a los otros y que hicimos? La crianza industrial es solo una de las cosas que venimos haciendo mal, tambien producimos plásticos que nos están envenenando y la tecnología no puede afanarse en buscar un material que no contamine, que se degrade? Claro que al igual que los automóviles eléctricos que ya debieran de ser obligatorios para dejar de seguir contaminando con gasolinas todo se reduce a lo mismo, dinero, los intereses económicos son mas importantes en este planeta que todas las vidas humanas y que toda la madre tierra. Y con esta mentalidad tan estúpida nuestro destino quedo bien claro con esta experiencia, los humanos nos extinguiremos solitos sí continuamos así. Así de simple.