En una persona que se desarrolla espiritualmente, el Yom Kipur no es una fecha específica en el calendario, sino un estado de desarrollo particular al que se debe llegar en cada nivel. ¿Qué significa esto?
El estado de «Yom Kipur» llega después de un estado llamado «Rosh Hashaná», en el que hemos definido que el gran objetivo de nuestras vidas será identificarnos con la fuerza general de la naturaleza. Una fuerza cuya característica es el amor y la entrega. Esta fuerza es la más grande, dirige toda la realidad y la conduce hacia un estado de perfección. Queremos coronarla como rey y asemejarnos a ella. A partir de esto, comenzamos a hacer exámenes y cálculos: ¿Qué ocurre dentro de nuestro corazón? Este examen es como una radiografía de nuestras intenciones internas, desde las cuales realizamos todo tipo de acciones. Y al igual que en una radiografía, este examen requiere una luz especial que penetre en lo profundo de nuestro corazón y nos muestre lo que sucede allí.
Las costumbres de Yom Kipur aluden a la raíz espiritual de las cosas. Para pasar de recibir placer y satisfacción para uno mismo a un estado de pensamiento sobre el bienestar del prójimo, primero es necesario detener la recepción egoísta. Por eso, en Yom Kipur hay cinco restricciones relacionadas con las necesidades esenciales de una persona: comer y beber, bañarse, ungirse, calzarse y las relaciones sexuales. Las restringimos, dejamos de usarlas, no recibimos nada para nosotros mismos.
¿A dónde nos lleva esto? Al estado que leemos en la tarde de Yom Kipur en la historia del profeta Jonás. Él recibió una misión divina, corregir el mundo. Después de intentar escapar de esta misión y fallar, Jonás fue a hablar con los habitantes de Nínive, y ellos abandonaron la violencia y la maldad que había entre ellos. La historia señala que debemos dejar de lado nuestros propios intereses y poner todo lo que hay en nosotros al servicio de los demás. Esta también es nuestra misión histórica como pueblo.
Los sabios dijeron: «Las transgresiones entre una persona y su prójimo, Yom Kipur no expía hasta que uno haya complacido a su prójimo». Complacer a su prójimo en el pleno sentido de la palabra significa llegar a un amor verdadero hacia él. Hacer una restricción en los cálculos egoístas de «¿qué gano yo de esto?», desarrollar la disposición a hacer todo por él, para llegar a través de él a una conexión con la fuerza suprema del amor. De este modo, la persona se eleva internamente desde el nivel de este mundo a un nivel espiritual de perfección y eternidad.
Shalom alejem rabino tengo una esperienza cuando picola 12 años habia caballo enterrrado en mitad de todo su cuerpo no habia modo de ayudarlo però le dava agua y comida y estava siempre a su lado yo lloraba con él sufria como él hasta qué llego una y se lo llevo no comprendia però el se despedio de mí y leer su mente ayudanos,fui a Israel en el 2022 por una semana para conocerla y fuimos a la mesada habia un cabello qué por él cobraban 5 euro quien lo montara y todos pagaron menos yo porqué cuando lei su mente ayudanos y tenia mucha sed…..me siento tan mal porqué no se como ayudar es como sì puedo hacerlo però estoy atada tengo semanas qué lloró rogandole a abba como puedo ayudar si no entiendo sus señales y codigos él solo quiere qué aprenda y estudie la kabals ahora por 4 vez hacer el yon kimpur esta vez es mal real la conexion con abba es como un degabu
Shalom , que todo el Pueblo de Israel llegue a ser ejemplo de conexion y amor mediante ser inscrito y sellado en el libro de la vida . Que seamos dignos de servir al Creador con alegria .
Muchas gracias