«No había días buenos para Israel como Tu b’Av, día en el que se permitía a las tribus mezclarse entre sí y donde cada persona otorgaba su benevolencia al prójimo».
Tiféret Shlomo
Tu b’Av es una festividad especial que simboliza el amor, las relaciones construidas por encima del odio, sobre la destrucción del Templo que se derrumbó debido al odio entre nosotros. Pero el odio lo corregimos cuando nos elevamos por encima de él; entonces podemos alcanzar ese gran amor de «Amarás a tu prójimo como a ti mismo» (Levítico 19:18).
Está escrito en la Mishná que Tu b’Av es el mejor día para que, según la tradición, las jóvenes de Jerusalén salieran, vestidas de blanco, a cantar por los huertos y viñedos. Los jóvenes solían unirse a ellas para elegir a su futura esposa. Tales son las representaciones características de la festividad de Tu b’Av.
Sin embargo, no se trata de un amor terrenal entre jóvenes hombres y mujeres en los viñedos, sino de un tipo de amor totalmente distinto: uno construido sobre el egoísmo – el interés por el bienestar propio en lugar de preocuparse por el bienestar de los demás– que destruyó el Primer y Segundo Templo durante el período comprendido entre el 17 de Tamuz y el 9 de Av, y que recientemente hemos conmemorado. Estos días oscuros le recuerdan al pueblo judío la destrucción de los dos templos así como otros problemas y aflicciones que hemos sufrido. Y solo unos días después, cuando todo ha acabado y se ha corregido, comienza un nuevo período.
La festividad de Tu b’Av simboliza el periodo en el que construimos un nuevo Templo en el corazón, en la conexión positiva entre nuestros corazones. Buscamos un compañero espiritual que nos ayude a alcanzar esto: el compañero espiritual tanto para hombres como para mujeres es la fuerza superior de amor y otorgamiento a la que llamamos «Creador». Nos conectamos a Él y juntos recibimos satisfacción absoluta, deleite e iluminación —la revelación del verdadero mundo— que existe en esa realidad sublime y completa y no solo en este pequeño fragmento de realidad que conocemos como nuestro mundo. Todo el proceso de unión en Tu b’Av simboliza nuestra corrección suprema, la reconstrucción del Templo y nuestra transición del odio al amor.
¿Qué es el amor?
El verdadero amor –no el que se da a nivel corporal, tal como solemos imaginar– es un sentimiento especial de conexión entre nosotros que nos eleva a la eternidad, a la plenitud y a una expansión infinita de nuestros sentimientos y pensamientos. Cuando las relaciones son con este tipo de amor, comenzamos a sentir que existimos eternamente, totalmente realizados. Imagina la sensación de que todos te aman, que todos se relacionan contigo como si fueras su propio hijo. Ese es el tipo de sensación que necesitamos proporcionar a cada uno de nosotros.
Sin embargo, se requiere una condición especial para lograr este amor verdadero. El verdadero amor se desarrolla solamente si se conectan dos fuerzas opuestas, dos atributos contradictorios, en una sola fuerza —una nueva conciencia, comprensión y sensación— que nos eleva al nivel superior de realidad espiritual perfecta.
Por eso Tu b’Av (el 15 de Av), el día del amor, viene justo después de Tisha b’Av (el 9 de Av), el día de la destrucción. Solo después de la enorme y horrible crisis en la que revelamos el mal, el odio entre nosotros, podemos corregirnos y alcanzar el verdadero amor. Y entonces comienza un nuevo período. Pero para alcanzar el amor verdadero, primero es preciso reconocer que nuestro estado es completamente opuesto a él.
Cómo construir el tercer templo
Puede que no sea obvio para nosotros, pero toda la naturaleza funciona a través de contrastes. La evolución nos muestra la interacción dinámica de dos fuerzas opuestas. Estas fuerzas se manifiestan como más / menos, frío / calor, flujo / reflujo, masculino / femenino, y crean niveles más profundos de conflicto e intereses egoístas y, a partir de ello, un mayor espíritu de reciprocidad y conexión. Por eso, el primer paso indispensable es revelar el estado de fragmentación –el estado actual de la humanidad– para luego juntar todas las piezas y reconstruir un todo perfecto. Esto es lo que necesitamos reconstruir juntos a través de nuestras relaciones de consideración mutua y reciprocidad.
Dice El libro de los Salmos que el Tercer Templo será llamado «una casa de plegaria para todas las naciones». Simbólicamente, Tu b’Av indica que esta es una festividad de amor para el mundo entero. Es como si el 15 de Av fuera una especie de Día de San Valentín para el conjunto de la humanidad.
¿Qué otra cosa implica la construcción del Tercer Templo? Habla de un estado en el que nos conectamos en un solo sistema llamado Adán (humano), que proviene de la raíz hebrea Domé (semejante), como en «a semejanza del superior» (Domé le Elyon). Cuando este sistema esté conectado por medio de la fuerza positiva, cuando la humanidad esté conectada positivamente, ese estado se llamará el Tercer Templo. El Creador será revelado en el sistema de conexión humana positiva como la fuerza superior del mundo. Por lo tanto, viviremos en una sensación de eternidad y plenitud, en un mundo totalmente diferente: es lo que llamamos «el Tercer Templo». Será el verdadero día del amor que se recoge en las palabras «El amor cubre todas las transgresiones» y «Ama a tu prójimo como a ti mismo», que representa el culmen de la humanidad.
Eso es lo que Tu b’Av verdaderamente simboliza: el amor que se construye específicamente sobre el odio que descubrimos entre nosotros a cada momento. Seamos diligentes reconociendo el mal para, por encima de él, empezar a construir un amor mutuo y extender ese manto de afecto por toda la Tierra.
Construir amor verdadero por sobre cualquier dificultad ❤️
Construir el Amor es la tarea para elevar el Alma a los mundos superiores y contagiar a la humanidad será nuestra intención en una sola Alma será maravilloso construir el tercer templo sólo juntos Por el pueblo judio B,H